No es de extrañar que la Torre de Belém esté en la lista de los monumentos nacionales más famosos.
Es una de las 7 maravillas de Portugal y todavía es considerada patrimonio de la humanidad por la UNESCO.
¿Qué secretos esconde la Torre de Belém?
Además de ser un puesto de batalla, la Torre también sirvió como faro y... ¡mazmorra! ¡Los prisioneros estaban en el piso de abajo, que era tan bajo que ni siquiera podían ponerse de pie! ¡Si es verdad! Y más curioso que eso, ¡una de sus esculturas exteriores representa un rinoceronte!
También hay 3 santos tallados en las paredes de la Torre: Nossa Senhora do Bom Sucesso, São Vicente y São Miguel.
Estos son pequeños secretos entre tantos otros, que custodian la famosa e imponente Torre de Belém que, a pesar de ser tan conocida con ese nombre, tiene el nombre oficial de “Torre de São Vicente de Belém” en memoria del santo patrón de la ciudad. .
Construido hace 5 siglos por Francisco de Arruda, ¡fue la primera línea de defensa del Tajo con 16 cañones!
Dividida en 5 áreas principales (la sala del gobernador, la sala de audiencias, la sala de los reyes, la capilla y la terraza de la Torre), la Torre de Belém recibe la visita de los turistas más curiosos.
